Muchas veces habíamos visto este pueblo de la Cuenca de Pamplona en las faldas del Perdón, pero nunca lo habíamos visitado. Una Musicata fue la excusa perfecta para pasar un rato a gusto en su sociedad Txopodi… ¡y planear casi ya la próxima visita! 😉
¡Gracias al concejo, a Bodegas Malón de Echaide y en especial a María por sus gestiones!
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